lunes, 16 de noviembre de 2015

McDonald's es imposible






 De Chelsea Martin.



Comer en McDonald's es matemáticamente imposible.
Porque antes de que puedas comer, tienes que ordenar.
Y antes de poder ordenar, tienes que decidir lo que quieres.
Y antes de que puedas decidir lo que quieres, tienes que leer el menú.
Y antes de poder leer el menú, tienes que estar frente al menú.
Y antes de poder estar frente al menú, tienes que esperar en la fila.
Y antes de que puedas esperar en la fila, tienes que conducir hasta el restaurante.
Y antes de poder conducir hasta el restaurante, tienes que subir a tu coche.
Y antes de que puedas subir a tu coche, tienes que ponerte la ropa.
Y antes de poder ponerte la ropa, tienes que salir de la cama.
Y antes de poder levantarte de la cama, tienes que dejar de estar tan deprimido.
Y antes de que puedas dejar de estar tan deprimido, tienes que entender qué es la depresión.
Y antes de que puedas comprender qué es la depresión, hay que pensar con claridad.
Y antes de poder pensar con claridad, hay que apagar el televisor.
Y antes de apagar el televisor, tienes que tener las manos libres.
Y antes de tener las manos libres, tienes que dejar de masturbarte.
Y antes de que puedas dejar de masturbarte, tienes que bajar tu mano.
Y antes de que puedas bajar tu mano, hay que imaginar a alguien que realmente te gusta con sus pantalones, que te anima a explorar tus genitales.
Y antes de que te puedas imaginar a alguien que realmente te gusta con sus pantalones, que te anima a explorar tus genitales, hay que imaginar a esa persona acariciando tu cuello.
Y antes de que te puedas imaginar a esa persona acariciando tu cuello, hay que imaginar a esa persona caminando hacia ti mirándote determinadamente. 
Y antes de que te puedas imaginar a esa persona acercándose a ti mirándote determinadamente, tienes que elegir quién es esa persona.
Y antes de que puedas elegir quién es esa persona, te tiene que gustar alguien.
Y antes de que te pueda gustar alguien, tienes que interactuar con alguien.
Y antes de poder interactuar con alguien, tienes que presentarte.
Y antes de que puedas presentarte, tienes que estar en una situación social.
Y antes de que puedas estar en una situación social, tienes que ser invitado a algo de alguna manera.
Y antes de que puedas ser invitado a algo de alguna manera, tienes que recibir una llamada telefónica de un amigo.
Y antes de que puedas recibir una llamada telefónica de un amigo, tienes que tener una reputación de ti mismo como alguien divertido.
Y antes de que puedas tener una reputación de ti mismo como alguien divertido, tienes que ser notablemente más divertido en varias ocasiones.
Y antes de que puedas ser notablemente más divertido en varias ocasiones, tienes que ser divertido una vez en la presencia de dos o más personas.
Y antes de que puedas ser muy divertido una vez en la presencia de dos o más personas, tienes que estar borracho.
Y antes de que puedas beber, tienes que comprar alcohol.
Y antes de poder comprar alcohol, hay que querer alterar tu estado psicológico.
Y antes de querer alterar tu estado psicológico, hay que reconocer que tu estado psicológico actual no es satisfactorio.
Y antes de que puedas reconocer que tu estado psicológico actual no es satisfactorio, tienes que cansarte de tu estilo de vida.
Y antes de que puedas cansarte de tu estilo de vida, hay que repetir los mismos patrones una y otra vez sin parar.
Y antes de que puedas repetir los mismos patrones una y otra vez sin parar, tienes que perder mucha de tu creatividad.
Y antes de que puedas perder mucha de tu creatividad, tienes que dejar de leer libros.
Y antes de que puedas dejar de leer libros, hay que pensar que te beneficiarías de la lectura con menor frecuencia.
Y antes de que puedas pensar que te beneficiarías de la lectura con menor frecuencia, hay que desanimarse de la palabra escrita.
Y antes de que puedas desanimarte de la palabra escrita, hay que leer algo que refuerce tus inseguridades.
Y antes de poder leer algo que refuerce tus inseguridades, tienes que tener inseguridades.
Y antes de que puedas tener inseguridades, tienes que estar despierto durante una parte del día.
Y antes de que te mantengas despierto durante una parte del día, tienes que sentir la motivación para despertar.
Y antes de poder sentir la motivación para despertar, hay que soñar conversaciones perfectamente sincronizadas con las personas con las que deseas hablar.
Y antes de que puedas soñar conversaciones perfectamente sincronizadas con las personas con las que deseashablar, tienes que tener una idea general de lo que es una conversación perfectamente sincronizada.
Y antes de que puedas tener una idea general de lo que es una conversación perfectamente sincronizada, tienes que ver un montón de películas en las que la gente exitosa habla entre sí.
Y antes de poder ver un montón de películas en las que la gente exitosa habla entre sí, tienes que tener un interés en otras personas.
Y antes de que puedas tener un interés en otras personas, tienes que tener alguna manera de beneficiarte de otras personas.
Y antes de que pueda tener alguna manera de beneficiarte de otras personas, tienes que tener metas.
Y antes de que puedas tener metas, tienes que querer el poder.
Y antes de que puedas querer el poder, tienes que sentir codicia.
Y antes de poder sentir codicia, tienes que sentir que mereces más que otros.
Y antes de que puedas sentir que mereces más que otros, hay que sentir un disgusto general hacia la población humana.
Y antes de que puedas sentir un disgusto general hacia la población humana, tienes que ser herido emocionalmente.
Y antes de que puedas ser herido emocionalmente, tienes que ser tratado mal por alguien que piensas que te importa en un estado ingenuo y vulnerable.
Y antes de que puedas ser tratado mal por alguien que piensas que te importa en un estado ingenuo y vulnerable, tienes que sentirte inferior a esa persona.
Y antes de que te sientas inferior a esa persona, tienes que verlo riéndose y caminando hacia su casa con la camisa y el sol sobre él.
Y antes de poder verlo riéndose y caminando hacia su casa con la camisa y el sol encima de él, tienes que ir a uno de sus shows al aire libre.
Y antes de poder ir a uno de sus shows al aire libre, tienes que pretender saber algo sobre música.
Y antes de poder pretender saber algo acerca de música, tienes que sentirte avergonzado de tus verdaderos intereses.
Y antes de que puedas sentirte avergonzado de tus verdaderos intereses, tienes que darte cuenta de que tus intereses son diferentes de los intereses de los demás.
Y antes de que puedas darte cuenta de que tus intereses son diferentes de los intereses de los demás, tienes que ser regularmente incomprendido.
Y antes de que puedas ser regularmente incomprendido, tienes que ser casi completamente un debilitado social.
Y antes de que puedas ser casi completamente un debilitado social, tienes que ser un paria.
Y antes de que puedas ser un paria, tienes que ser rechazado por todo tu grupo de amigos.
Y antes de que puedas ser rechazado por todo tu grupo de amigos, tienes que ser sofocantemente leal a tus amigos.
Y antes de que puedas ser sofocantemente leal a tus amigos, tienes que tenerle miedo a la pérdida.
Y antes de que puedas tenerle miedo a la pérdida, tienes que perder algo de valor.
Y antes de que puedas perder algo de valor, tienes que darte cuenta de que eso nunca va a cambiar.
Y antes de que puedas darte cuenta de que eso nunca va a cambiar, tienes que tener la misma conversación con tu abuela cuarenta o cincuenta veces.
Y antes de que puedas tener la misma conversación con tu abuela cuarenta o cincuenta veces, tienes que tener el deseo de hablar con ella y formar una relación significativa.
Y antes de que puedas tener el deseo de hablar con ella y formar una relación significativa, tienes que amarla.
Y antes de poder amarla, tienes que darte cuenta de la gran tolerancia que ella te tiene.
Y antes de que te des cuenta de la gran tolerancia que ella te tiene, tienes que romper una de sus tazas de té de porcelana favoritas que su madre le dio y te olvides de pedir disculpas.
Y antes de poder romper una de sus tazas de té de porcelana favoritas que su madre le dio y te olvides de pedir disculpas, tienes que insistir en el uso de las tazas de té para tu fiesta de té imaginaria.
Y antes de que puedas insistir en el uso de las tazas de té para tu fiesta de té imaginaria, tienes que cultivar tu imaginación.
Y antes de poder cultivar tu imaginación, tienes que pasar mucho tiempo a solas.
Y antes de poder pasar mucho tiempo a solas, tienes que encontrar la manera de escabullirte de sus hermanos.
Y antes de poder encontrar la manera de escabullirte de sus hermanos, tienes que tener hermanos.
Y antes de que puedas tener hermanos, tienes que decepcionar a tus padres.
Y antes de poder decepcionar a tus padres, tienes que estar tranquilo, educado y desapercibido.
Y antes de que puedas estar tranquilo, educado y desapercibido, tienes que entender que es posible decepcionar a tus padres.
Y antes de que puedas comprender que es posible decepcionar a tus padres, tienes que ser duramente reprendido.
Y antes de que puedas ser duramente reprendido, tienes que cantar en voz alta en un momento inapropiado.
Y antes de poder cantar en voz alta en un momento inapropiado, tienes que ser feliz.
Y antes de que puedas ser feliz, tienes que ser capaz de reconocer la felicidad.
Y antes de que pueda ser capaz de reconocer la felicidad, tienes que conocer la angustia.
Y antes de poder conocer la angustia, tienes que ser cuidado por una niñera mediocre durante una semana.
Y antes de que puedas ser cuidado por una niñera mediocre durante una semana, tienes que vomitar en la niñera de otro, más agradable.
Y antes de poder vomitar en la niñera de otro, más agradable, tienes que estar enfermo.
Y antes de que puedas estar enfermo, tienes que comer algo a lo que seas alérgico.
Y antes de poder comer algo a lo que seas alérgico, tienes que tener alergias.
Y antes de que puedas tener alergias, tienes que nacer.
Y antes de que puedas nacer, tienes que ser concebido.
Y antes de que puedas ser concebido, tus padres tienen que copular.
Y antes de que tus padres puedan copular, tienen que sentirse atraídos el uno por el otro.
Y antes de que puedan sentirse atraídos el uno por el otro, tienen que tener intereses comunes.
Y antes de que puedan tener intereses comunes, tienen que hablar entre sí.
Y antes de que puedan hablar entre sí, tienen que conocerse.
Y antes de que puedan conocerse, tienen que estar suspendidos en la escuela el mismo día.
Y antes de que puedan estar suspendidos en la escuela el mismo día, tienen que ser atrapados andando a escondidas fuera de la escuela por separado.
Y antes de que puedan ser atrapados andando a escondidas fuera de la escuela por separado, tienen que pensar en un lugar a donde ir.
Y antes de pensar en un lugar a donde ir, tienen que estar familiarizados con McDonald's.
Y antes de que puedan estar familiarizados con McDonald's, tienen que comer comida de McDonald's.
Y comer la comida de McDonald's es matemáticamente imposible

lunes, 3 de agosto de 2015

kétchup, cátsup



Escaleras eléctricas devoran a mujeres en China. Estudiantes practican sexo oral en los campos de la universidad de Chihuahua. En mi niñez las escaleras eléctricas representaban el equivalente lumpen a una montaña rusa en Reino Aventura, había temor, había emoción. Nunca practique sexo oral en los campos de la universidad de Chihuahua.

Tengo veintinueve horas viendo televisión, con la laptop sobre mis genitales, sobre el sillón en casa de mis padres, leyendo sobre escaleras eléctricas que devoran mujeres en China y estudiantes que practican sexo oral en los campos de la universidad de Chihuahua.

En el televisor una joven mujer de rasgos exquisitos relata al Dr. Oz su asco y repulsión hacia el kétchup y creo estar enamorado. En el doblaje al español lo llaman kétchup, yo lo llamo cátsup, cátsup no kétchup, kétchup me parece chistoso. Me recuerda a una viejecita tía de mi padre que vive hace más de seis décadas en Oxnard, California entre vacas y árboles de aguacate, y que no habla palabra alguna de inglés, excepto kétchup, kétchup, kétchup…

Ahora la chica en la pantalla se muestra realmente aterrada al momento que le muestran un cazo grande-parecidos a los que mi madre usa para servir ensalada-repleto de kétchup, o mejor dicho cátsup, digámosle cátsup.

Mi madre repasa el periódico sin mucho interés y me recrimina el hecho de estar desempleado, en pijama, durmiendo-comiendo-viviendo sobre su sillón con la televisión encendida y la laptop sobre mis genitales desde hace meses. Yo no puedo responder ni concentrarme en nimiedades como estabilidad laboral y prestaciones superiores a las de ley cuando estoy encantado por una mujer de belleza inusitada que le tiene pavor a la cátsup. Yo la protegería de la cátsup, de la kétchup y de las escaleras eléctricas que devoran mujeres en China. Practicaríamos sexo oral en los campos de la universidad de Chihuahua y todo estaría muy bien.



viernes, 26 de junio de 2015

Lunes




Salgo a buscar trabajo esperando no encontrarlo. A la búsqueda de otro fracaso anunciado.

Salgo el lunes no muy temprano, recién bañado y desayunado (café a medias y huevos tibios).

Salgo el lunes no muy temprano, esperando a que se llegue el viernes para pasarme la derrota y culpa con un trago.

El anuncio pagado en la prensa local indica Buena presentación. Camisa arrugada- símbolo inequívoco de  soltería-, los sempiternos pantalones de poliéster, zapatos gastados pero bien lustrados y el pelo engominado echado hacia la nuca.

Una triste mueca intentando ser sonrisa, mucho asentir y tratar de decir lo que supongo quieren escuchar.

Soy un perro domesticado, denme palmadas en el lomo y un par de croquetas cuando lo hago bien.

Las manos se estrechan y parto de regreso esperando que esa llamada nunca llegue.

El autobús se mueve lento y los cuerpos se aglutinan.Todo es sudor y verduras podridas.

Un viejo refunfuña y discute colérico con su sombra.

Las mujeres de amplio vientre en ropa deportiva se aferran con más fuerza a sus bolsas plásticas de mercado.

Un niño chilla histérico.

El viejo apesta a licor. Coloca un cigarro entre sus secos labios y lo prende. Las buenas personas a su lado se asombran pero el continua fumando inmute. Es el rey del Circunvalación 1.

Al momento el conductor se percata del anciano perturbando la paz pública y para su monstruoso vehículo. Se planta frente al viejo y le retira hábilmente el cigarro entre los labios al rey del Circunvalación 1.

Seguimos nuestra ruta un tanto a la expectativa: nuestro rey ha sido ofendido. El viejo monarca se inquieta y maldice al aire. Algunos transeúntes ríen nerviosos, comentan entre si y observan maravillados el pequeño espectáculo.

El anciano en un momento de lucidez y pletórica venganza abre el cierre en su pantalón y libera su arrugado miembro. Un pequeño y amarillento charco comienza a formarse en el suelo del autobús.

El rey del Circunvalación 1 sonríe complacido, lleno de orgullo.

Afuera todo parece transcurrir muy lentamente. 

Ya casi es medio día y el calor se vuelve insoportable.


miércoles, 17 de junio de 2015

Más extraño que el paraíso, parte II


La Première Aventure céleste de Monsieur Arthur

“La única intervención registrada de Isaac Newton mientras fue miembro del Parlamento fue una petición para que abrieran una ventana.”  - Isaac  Asimov.

Hoy ha muerto mamá. O quizá ayer. No lo sé. Recibí un e-mail del asilo: «Falleció su madre. Entierro mañana. Sentidas condolencias.» Pero no quiere decir nada. Quizá haya sido ayer.   

El otro, al que le dicen el Juan de Dios, es al que le pasan las cosas. Yo camino por las calles de la ciudad  y paro por un momento, quizá ya mecánicamente, para mirar a los niños inhalando cemento y escupiendo fuego, el caos multicolor del tráfico, la arquitectura de ayer y de mañana, el movimiento constante de las multitudes de humanidad a las cuales no siento pertenecer, las revistas porno y los cuentos de Condorito. Yo sé de Juan de Dios por medio de pasquines de rock, cartelones de teatro, películas. A mí me gustan los cómics de  Rius, Jodorowsky, Daniel Clowes, Los invisibles y el Crumb. En cuanto a cine, me gustan Jean Luc Godard, Leos Carax, Wong Kar Wai, Woody Allen, Emir Kusturica, Wim Wenders,Gaspar Noe, Kubrick, Lars Von Trier, Roman Polansky, Jim Jarmush, la filosofía neorrealista, el Cahiers du Cinema, el diseño de imagen del Kurosawa y el Ozu, etcétera. En cuanto a literatura me gustan Leonard Cohen, Dostoyevsky, Herman Hesse, Marcel Proust, Bukowski,  Rimbaud,Nabokov, Henry Miller,  Albert Camus, Jean Paul Sartre, J.D. Salinger, los beats como el Burroughs, Kerouac y Ginsberg… la mejorliteraturala escribieron los rusos del siglo XIX . En cuanto a música me gustan Bowie, Leadbelly, Serge Gainsbourg, Black Flag, Iggy Pop, los beastie boys, el blues rural y el blues electrio de chicago, Sonic Youth, Nirvana, Flaming Lips, the birthday party, Bauhaus, Joy division, Daft Punk, Agustín Lara, Public Enemy, Pixies,  At the drive in, MC5, Mussorgsky, los smiths - me caga Morrisey-Patti Smith, el velvet underground, Lou Reed, Refused, Miles Davis, Coltrane, Ornett Coleman, Sun ra y su orquestra, José Alfredo Jiménez, el Esquivel y un putamadral  más. No escucho a los magneto cuando esta mi noviecita. Mi escarabajo favorito es Ringo. Prefiero a Yoko Ono que a John Lennon. De arte me gusta Duchamp, Picasso, Francis Bacon, Jackson Pollock, Warhol y Goya y el bosco y Rembrandt , Louies Wain y Basquiat. De teatro me gustan Jean Genet y Bertold Brecht y Samuel Beckett. De comer me encantan los tacos al pastor y los montados ,la comida china y el espagueti con camarones, el pavo es por lo único que vale la pena la navidad y los chiles rellenos de queso,  y el café de chinos y el chocolate que te sirven en el Deux Magots y el agua de horchata y el helado de limón. Me gustan el alcohol, el tabaco y otras sustancias, ser un adicto requiere de disciplina y entrega. Me gusta el olor a smog, el ruido.


 El Juan comparte estas preferencias, pero de manera banal que los convierte en los atributos de un actor. Sería una exageración el decir que la nuestra es una relación hostil. Yo vivo y me dejo seguir viviendo para que el Juan invente sus alucines, y su desmadre me justifica. Confieso que de vez en vez se avienta buenas puntadas, pero esas puntadas no pueden salvarme, quizá porque lo que es chido no le pertenece a nadie, ni siquiera a él, sino al lenguaje y a la tradición. Además yo estoy destinado a morir, y tan sólo un instante de quien soy pudiese sobrevivir en él. Poco a poquito le estoy entregando todo a él, aunque estoy consciente de sus perversas costumbres de falsificar y exagerar las cosas. Spinoza sabía que todas las cosas suspiran por persistir en su ser, la piedra quiere eternamente ser piedra y el tigre un tigre. Yo me quedaré en Juan de Dios, no en mí mismo (sí fuese cierto que yo existiera), pero me reconozco cada vez menos   que en tantas otras cosas o en la distorsión de un Theremin o un solo de Thurston Moore. Hace meses que intenté deshacerme de él y me fuí de las mitologías del camino en el gabacho y el periodismo gonzo y la deconstrucción Dadaísta y Nietszcheana del ser a los juegos con el tiempo y el infinito (además de que tenía un chingo de tarea), pero esos juegos le pertenecen a Juan de Dios ahora. Acabaré teniendo que imaginarme otras cosas. Mi vida es una salida de emergencia y todo le pertenece a la nada, o a él.

No sé cuál de los dos ha escrito estas líneas.