lunes, 28 de marzo de 2016

Tibio




"Mas porque eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca."


Me arrepiento de todo...
Aventando pedradas al cielo.
Nomás escupiendo pa arriba.
Voy a hablar con frases hechas y obviedades el resto de mi vida.
Me estoy quedando ciego,
No sé si estoy deprimido o tengo diabetes
No Mamá para que quiero un trabajo estable con horario de oficina y prestaciones:
Seguro médico, crédito en Infonavit y una pensión para mi retiro.
Ya te dije que soy artista y vivo del aplauso de la gente bonita.
Alguien por favor otórguele una beca a este joven artista volcando su miseria en público.
Alguien dele un fonca a este pobre desamparado.
-Taller para redactar de forma correcta y concisa tu petición de beca del fonca-
Me convertí en alcohólico tan paulatinamente que ni me di cuenta.
Güevos tibios, pedos tristes, nalgas miadas.
Tecate azorrillada y tibia…

Esto no es una metáfora, es una mala cena.

viernes, 11 de marzo de 2016

Thurston










transformer

no tuvimos a ningún bob dylan
circunvolución
rápidas palabras duramente esparcidas
desde un cubo agujereado por disparos
una cesta que hace agua
desunión del no-universo mamando la luz del cielo 1973
niños cachorro lanzando pies de micro hacia rotas conclusiones
creo que ayudé a aniquilar los sesenta
dijo ig (david desternillándose de risa, chirriante, delirante) + putón homosexual
ricos dioses animales ardiendo, en plena forma, en el sofá de dinah [1]
el radical de la tele besando al guitarra solista como un puñetazo?
la nube oscura
dylan borracho, acabado, aburrido
y ella hechizada, un espejo/reflejo, chico qué pelos
lou, rugido de la engreída reina, rock crudo, escena callejera?
polla, punk, boca: sííí
te vi decaído y contento y decidido
la rubia surrealista, rubia en el bowery
camarera con peinado de colmena, ¿qué va a ser cariño?
dos de la madrugada
la cafetería de dave, canal y broadway
ningún bobby beatle sumiso, ¿a quién le importa?, los stones qué asco
los muertos son ‘’tediosos, una mentira, sin talento’’ [2]
súbeles de volumen o inyéctales
es lou reed: genio, imperioso
a pesar de ello, aprécialo
ríete mientras entras en un club de mierda
lydia y su gran bate de béisbol de plástico
lou está tan jodido y me encuentro con tus ojos
no wave en la plataforma del L train, calle 14 con la primera

rock’n’roll animal y los niños [3]
nadie puede meterse contigo
la mano de william alzada en el aire con el alarido de la bebé coco en kansas [4] ?
posdata: electricidad, dee dee como el punk estafado [5]
‘’¿qué? crece, hazte mayor, vete a casa, que se joda radio etiopía, esto es radio brooklyn’’
y el imperio es salvaje
y somos tus amigos a pesar de todo oh rey
oh rey, rey, el rey ha muerto, que vivan por siempre los
…secretos sexys

no hay final a la vista

bendiciones, esposa, amor, poeta, perro, ciudad
rock‘n’roll
tú me abrazaste


Thurston Moore
6 de noviembre de 2013
Poetry Project, St. Mark’s Church On-the-Bowery, NYC
Traducción: Tony Sanders


[1] Se refiere a la sorprendente aparición de Iggy Pop y David Bowie en el programa televisivo de Dinah Shore, en junio de 1977
[2] The Grateful Dead, los muertos agradecidos
[3] «The Kids», la canción del álbum Berlin
[4] La visita de Michael Stipe, Kim Gordon, Thurston Moore y su hija Coco a William Burroughs en su casa de Lawrence, Kansas, mayo de 1995
[5] Dee Dee Ramone

lunes, 7 de marzo de 2016

Return of the rat






«…nuestros mejores amigos eran las ratas que vivían junto al arroyo. Eran largas y negras. Las obsequiábamos con exquisitos bocados, tales como porciones de corteza de queso, cartílagos de cordero, y también les dábamos huevecillos de pájaro, y ranas, y pajarillos recién nacidos. Agradecidas de estas atenciones, las ratas acudían en masa a nosotros, tan pronto como nos veían llegar, dando claras muestras de confianza y afecto, y se subían por nuestros pantalones, y se colgaban de nuestros pechos. Y, entonces, nos sentábamos entre ellas, y les dábamos de comer, con nuestras propias manos, ya una rana gordezuela, ya un tordo de nido. O bien, atrapando con rápido ademán un ratón rollizo que descansara en nuestro seno, soñoliento tras haber comido en abundancia, lo dábamos a comer a su madre, a su padre, a su hermano o a su hermana, o a otro pariente menos afortunado.
En estas ocasiones, Watt y yo conveníamos, tras un breve intercambio de consideraciones, en que nos acercábamos a Dios».